Nombre común
Barbo comizo.
Clasificación
Clase
Actinopterigii.
Orden
Cypriniformes.
Familia
Cyprinidae.
Género
Luciobarbus.
Distribución
Cuencas del Tajo y Guadiana. Existen citas antiguas en el Guadalquivir y Ebro, pero o bien fueron confusiones o, hasta donde se sabe, se han extinguido allí.
Biotopo
Su hábitat predilecto son los cursos medios y bajos de grandes ríos con aguas templadas, corriente lenta, abundancia de invertebrados bentónicos y orillas boscosas. Pueden vivir también en embalses y estuarios. Los jóvenes habitan en arroyos y ríos de menor calado.
Forma
Cuerpo fusiforme y alargado que se estrecha hacia la aleta caudal. La dorsal es corta, alta y de forma cóncava, naciendo más cerca de la cola que de la cabeza. Tiene cuatro radios duros, el primero de los cuales es muy fuerte, alargado y dentado, y ocho blandos. Las ventrales nacen más atrasadas que la dorsal y tienen dos radios duros y siete blandos. La anal tiene tres radios duros y cinco blandos. La aleta caudal está fuertemente ahorquillada con sus lóbulos muy agudos.
La cabeza es muy grande, de perfil recto y con un abultamiento en el hocico. La boca, que se encuentra en posición dorsoterminal, es ligeramente protráctil y de tamaño más o menos pequeño, con labios finos cubiertos de papilas. Tiene cuatro barbillones finos y cortos, un par en la comisura labial y otro en la mandíbula superior.
Los barbos comizos del tajo tienen el cuerpo menos alto, las aletas más cortas, el hocico más pequeño y los barbillones de menor longitud que los del Guadiana.
Coloración
En general las partes superiores y aletas son verde aceitunado con los flancos algo más claros y la zona ventral blancuzca o anaranjada. De todos modos la coloración puede variar bastante incluso entre ejemplares de una misma población, pudiendo contener tonos pardo oscuro, ocráceo, grisáceo o plateado. Los jóvenes están jaspeados de manchas negras.
Tamaño
La talla adulta normal oscila entre 40 y 60 centímetros, aunque puede llegar hasta el metro.
Diferencias sexuales
Las hembras suelen ser de mayor tamaño y más robustas, teniendo además la aleta anal proporcionalmente más larga.
Acuario
Para los mayores ejemplares necesitaremos 1200 litros o más, ya que requieren aguas profundas y un buen espacio de nado. El sustrato debe ser de grava suave y sin objetos cortantes para que no se dañen sus barbas. En los laterales colocaremos estructuras de troncos, raíces y algunas plantas que simulen una orilla boscosa y le den refugio.
La filtración debe ser poderosa ya que es un pez de gran tamaño que genera muchos desechos. También debemos tener en cuenta que requiere corriente aunque no demasiado fuerte, por lo cual necesitaremos una buena bomba capaz de dar movimiento a una gran cantidad de agua. En clima mediterráneo no hará falta calentador, pero en zonas con inviernos muy fríos debemos resguardar la urna e incluir quizá algo de calefacción si es necesario. Igualmente si el verano es muy caluroso procuraremos tener el acuario en zona sombreada. A pesar de tener que guardar estas precauciones en caso de temperaturas extremas es un pez que tolera un amplio rango térmico, por lo cual podremos mantenerlo en un estanque exterior.
El barbo comizo no es agresivo de modo que si tenemos el espacio suficiente podemos colocarle con peces menores que él, teniendo en cuenta que no le quepan en la boca. Debemos elegirle compañeros que ocupen principalmente la superficie para que no haya competencia por el espacio ni molestias.
Temperatura
El óptimo está entre 15 y 25, si bien soporta un amplio rango de temperaturas de 1 a 30 grados.
Agua
Sin datos.
Alimentación
Larvas de insectos, invertebrados bentónicos, detritus, plantas y algas. La posición de su boca le habilita especialmente para alimentarse de la columna de agua capturando en ella invertebrados y detritus flotante, pero también explota los fondos.
Su dieta es similar a la del pez dorado (Carasius auratus) y a la del Koi (Cyprinus carpio) por lo que en cautividad podemos usar como base los alimentos comerciales destinados a éstos. Como comida natural podemos dar papillas con ingredientes vegetales y animales, guisantes descascarillados, verduras hervidas, trocitos de gamba, mejillón o pescado. Debemos proporcionarles un componente vegetal en la alimentación rico y variado para que al acusar la falta de éste no intente suplirlo atacando las plantas.
Comportamiento
Su actividad es principalmente nocturna y crepuscular, permaneciendo escondido en un refugio durante el día a no ser que lo tiente una buena oportunidad de alimentarse. Es de carácter bastante pelágico permaneciendo relativamente lejos de las orillas aunque suele acudir a éstas si hay una buena oferta alimentaria en ellas. En invierno y verano cuando las temperaturas de las aguas son extremas puede sumergirse a 20 metros o más buscando aguas con temperaturas más suaves.
En estado juvenil vive en cardúmenes bastante unidos, pero a medida que crece se vuelve más solitario. De adulto es poco sociable y vive en grupos débilmente cohesionados de unos pocos ejemplares o incluso en soledad.
Reproducción
Para desovar migran a arroyos poco profundos, con sustrato de grava, corriente rápida y aguas limpias. Si es necesario saltarán obstáculos y se arrastrarán por aguas someras para llegar al lugar deseado.
La freza se produce de abrila junio. En el acto se reúnen en grupos de peces que coletean espasmódicamente mientras sueltan los huevos y esperma en el agua. Luego regresan de nuevo a los lugares donde viven de ordinario. Los jóvenes, entre tanto, nacen en los frezaderos, trasladándose a zonas más profundas conforme crecen.
Puede hibridar con L.Microcephalus y L.bocagei en los puntos de distribución en los que coincide con estas otras especies.
En cautividad sería sumamente difícil reproducirlos, y más aún si cabe para el aficionado. Habría que tener miles de litros para mantener un pequeño grupo mixto de machos y hembras. Luego se iría disminuyendo la temperatura del agua y aumentando la corriente progresivamente de abril en adelante para simular la migración a un arroyo.
Ficha realizada por: José Carlos